Las luchas por la independencia: mujeres, gauchos, esclavos



Juana Azurduy

http://www.elhistoriador.com.ar/articulos/miscelaneas/juana_azurduy_la_mas_grande_heroina_de_nuestra_independencia.php

Las mujeres en la independencia

http://www.chicos.ulp.edu.ar/wp/wp-media/wpGeneral/HTML/fechaspatrias/2014/07/mujeres_independencia/

Güemes

https://www.educ.ar/recursos/130948/cual-fue-el-papel-de-guemes-en-la-declaracion-de-la-independencia

http://www.elhistoriador.com.ar/biografias/g/guemes.php

Los afrodescendientes

http://www.elhistoriador.com.ar/articulos/independencia/la_otra_libertad.php

Los soldados del ejército de la independencia

Para luchar contra los invasiores ingleses habían creado milicias; con la revolución,
éstas se transformaron en ejército regular. Antes eran voluntarios, por lo que eran más
desorganizados: se retiraban del cuartel para realizar sus tareas habituales, se llevaban
las armas a sus casas, no efectuaban tanto entrenamiento.
Ante la perspectiva de viajar miles de kilómetros con muchos sacrificios, el
reclutamiento se hizo difícil, y la Junta apeló al reclutamiento forzoso de los
desposeídos: según la orden del 29 de mayo de 1810, el ejército debía constituirse sobre
la base de todos “los vagos y hombres sin ocupación conocida, desde la edad de 18 hasta
la de 40 años”, que se debían incorporar a los cuerpos ya existentes. Pero no había
tanta gente sin trabajo, tantos gauchos o gauderios (también llamados “changadores”,
jinetes libres de pingos cazados en la llanura, alimentados por vacunos cimarrones que
mataban a discreción, que vivían casi sin trabajar).[23] Es por ello que muchos peones
rurales o de transportes fueron enrolados por el ejército; la consecuencia fue la escasez
de mano de obra, lo que produjo demoras en el tráfico de mercaderías, ya que las
carretas quedaron sin personal, y lo mismo ocurrió con las tareas en las estancias.
También se reclutaron esclavos; la donación de esclavos a la patria era un buen signo
de adhesión al gobierno nacional. El Estado confiscó esclavos de españoles que no
apoyaban la revolución, y también compró esclavos a particulares. Los dueños de
esclavos recibieron una indemnización por la pérdida económica que esto les
significaba, siempre que el soldado muriese o se le otorgase la libertad por su valentía
en la lucha. En algunos momentos, la infantería negra era más de una cuarta parte de
las tropas regulares. Es por ello que el espíritu de la revolución se hizo carne en los
esclavos, y dejaron de ser tan dóciles como antes frente a sus amos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Situación Europea 1805 - 1810

La Confederación entre 1852 y 1862